Procedimiento
1 lechuga iceberg
1 manzana
250 gr. de queso fresco
1 puñado de pasas de Corinto
1 puñadito de nueces picadas
250 gr. de suprema de pollo cocinadas
Aceite de oliva
Vinagre balsámico
2 ctas de Equal Stevia
Sal
Elegimos una buena lechuga para la ensalada agridulce, la lavamos muy bien, la escurrimos, secamos con papel de cocina (o escurrimos con un centrifugador de verduras) y picamos en trocitos medianos. Lo metemos en el bowl.
Pelamos una manzana, le quitamos el corazón y el rabito, y la troceamos a daditos, el mismo corte que habremos decidido para el queso fresco y la suprema de pollo. Echamos todo en el mismo bowl que la lechuga.
Vamos con los frutos secos de la ensalada agridulce y, aquí, nos movemos con cantidades acordes a nuestros gustos, echando más o menos pasas de Corinto y nueces picadas según nos convenga.
Finalmente, preparamos el aderezo para la ensalada agridulce, combinando en un cuenco un chorro generoso de aceite de oliva, un chorreón de vinagre, Equal Stevia y un pellizco de sal. Batimos con el tenedor y con energía el aliño, hasta que emulsione, y regamos la ensalada agridulce en el momento de servir